El objetivo de esta tesis es ofrecer una reconstrucción de la teoría de la investigación de John Dewey, prestando atención a sus antecedentes en los escritos del padre del pragmatismo, Charles Sanders Peirce, y a algunas derivaciones de tal teoría en la teoría de la argumentación contemporánea y en los estudios sociales de la ciencia. La misma está dividida en tres partes dedicadas a (I) explorar algunos antecedentes de la teoría de la investigación de Dewey, (II) desarrollar y analizar críticamente los aspectos centrales de tal teoría y, por último, (III) seguir la pista de algunas de sus derivaciones. El punto de partida es el análisis de la concepción de la lógica de la investigación de Peirce, tal como éste la fuera construyendo a partir de su crítica a la filosofía moderna. Ofrecemos una reconstrucción de las ideas de Peirce que permite dar cuenta de que, pese a las importantes diferencias entre las ideas de Peirce y Dewey, los desarrollos de este último pueden ser considerados como una prosecución, en nuevas y profundas direcciones, de algunas de las ideas más destacadas del primero y que constituyen, por ello, una lectura posible de algunos de los escritos más destacados de Peirce. En la segunda parte, la central de esta tesis, se aborda la teoría de la investigación de Dewey. En este marco, se reconstruye la teoría de la experiencia de Dewey, que constituye, como se argumenta, un verdadero punto de partida para la teoría de la investigación. Se argumenta que la teoría de la experiencia de Dewey puede ser considerada como un análisis de las consecuencias para la filosofía de algunos de los resultados más influyentes en el campo de la biología, la psicología y la antropología social en relación con la comprensión de los seres humanos. Se reconstruye también la teoría de la investigación que, al ser comprendida como una forma de la experiencia, permite dar cuenta del carácter mediador y transformacional del conocimiento. Se analizan, asimismo, las consecuencias que para la comprensión de la lógica se siguen de dicha concepción y se argumenta que, pese a lo que Peirce y algunos intérpretes contemporáneos sostienen, la lógica de Dewey puede ser considerada una verdadera lógica. Además, en esta segunda parte se analiza la concepción deweyana de la valoración y se reconstruye una perspectiva acerca de la interdependencia del conocimiento y los valores. Asimismo, se argumenta que, y contra lo que las críticas de Horkheimer y Marcuse sugieren, la teoría de la valoración de Dewey tiene un potencial crítico que permite plantear y abordar el problema de los fines de la acción y, en especial, los de esa acción cognitiva a la que llamamos ciencia. En la tercera y última parte de esta tesis se abordan algunas de las derivaciones de la teoría de la investigación de Dewey. En primer lugar, se exploran las relaciones entre la propuesta de Dewey y la de uno de los más destacados representantes de la teoría de la argumentación contemporánea, a saber, Stephen Toulmin. Se muestra que en la obra de este último puede identificarse una dimensión pragmatista y deweyana. En segundo lugar, se aborda la cuestión de la relación entre la teoría de la investigación de Dewey y el giro hacia las prácticas de los estudios sociales de la ciencia. En particular, se analizan algunos aspectos de la obra de Bruno Latour y de la de Karin Knorr Cetina, mostrando las profundas e interesantes continuidades que suponen con el trabajo de Dewey. Además, se aborda un problema fuertemente discutido en el ámbito de la sociología del conocimiento, a saber, el problema de la reflexividad de los estudios de la ciencia, con el objetivo de ofrecer una mirada deweyana sobre tal cuestión, lo que permitirá sostener una interpretación de la filosofía del conocimiento de Dewey como filosofía política de la ciencia.