Frente a la problemática ambiental, la llamada racionalidad moderna ha sido señalada por diversas tradiciones del "ambientalismo crítico", como una causa central en el origen de los conflictos ambientales. En esta dirección, esta Tesis se propone realizar un análisis desde la filosofía de la biología sobre los discursos de la biología de la conservación (BC) -provenientes de libros de texto y artículos científicos- tratando de examinar en qué medida se reproducen ciertos elementos característicos de la racionalidad moderna y/o se presentan "fugas", esto es, otras aproximaciones que buscarían oponerse y superar tales supuestos modernos. Para ello, tres dimensiones de la racionalidad moderna fueron consideradas, a saber: a. la separación naturaleza-cultura, b. la jerarquización del saber científico, y c. la distinción ciencia-ética. A su vez se incluyó un análisis respecto de las particularidades en la producción de conocimiento científico especializado en BC en Argentina. En términos generales, los resultados obtenidos indican que, con respecto al dualismo naturaleza-cultura, bajo el concepto de biodiversidad se encuentran diferentes perspectivas sobre aquello que se debe conservar. Sin embargo en los artículos científicos se recupera una noción del "objeto" a conservar centrado en especies y que comprende a la biodiversidad como aquello que se opone a lo humano. Pese a esto encontramos también nuevas aproximaciones que proponen perspectivas con otros presupuestos epistemológicos y ontológicos, los cuales entienden a la biodiversidad por fuera de la mirada dualista. En cuanto a la jerarquización del saber científico, destacamos que, si bien se plantea teóricamente una BC interdisciplinaria, la mayor parte de la investigación en BC es disciplinar y proviene de un marco ecológico, con abordajes propios de la disciplina. La dimensión social de estos estudios se soslaya tanto en las temáticas estudiadas como en los marcos teóricos utilizados. A su vez, hemos recuperado otros abordajes y artículos que problematizan esta mirada y buscan la integración de diferentes voces y saberes para la producción de conocimiento y prácticas de la BC. Por otro lado, la relación entre la ética y la BC constituye un vínculo casi excepcional en la biología y en la ciencia en general en vistas de que la BC se erige como una disciplina basada en valores. Sin embargo, ciertas dimensiones éticas no parecen ser propiamente problematizadas, tales como la valoración de los organismos, omitiendo la reflexión ética en los artículos científicos del área. Estas características parecen ser reproducidas en Argentina, donde a su vez aparecen las peculiaridades institucionales propias. A lo largo del análisis hemos podido reconocer que más allá de la generalidad en la BC, tal vez lo importante no esté en los "números" en la medida en que las fugas aparecen en las llamadas minorías. De ellas pueden reconocerse aportes que buscarían repensar formas de conservación y cuidado ambiental por fuera de la reproducción de los cánones modernos. Así se replantearían los vínculos humano-naturaleza por fuera de una lógica de oposición, realizando estudios y planes de manejo que integrarían otro tipo de saberes locales, despertando preguntas sobre cuál es el rol de los biólogos en las decisiones sobre conservación y abriendo nuevos desafíos éticos que rehúsan de la formulación de principios universales. Este estudio busca suscitar ciertas preguntas para la profundización de análisis interdisciplinarios, de nuevos diálogos, allí donde aparecen formas de cuidado ambiental que puedan escaparse de supuestos modernos que construyen una visión reificadora y mercantilizadora de la naturaleza.