De acuerdo al enfoque prioritario en múltiples estudios, podría sostenerse que, durante la década de 1990, Argentina concibió al Mercosur desde un enfoque esencialmente comercialista; y como punto de partida para alcanzar una integración continental e insertarse en la economía global. En consecuencia, también podría afirmarse que durante la etapa de auge del neoliberalismo primó en los distintos gobiernos argentinos un desinterés por desarrollar con Brasil y el resto de los países otras agendas que no fueran las económicas, puesto que la prioridad que ocupaba Estados Unidos en la política exterior argentina motivaba la concreción inicial de cambios políticos y económicos.Aun cuando pudieran sostenerse estas afirmaciones, en esta investigación pretendemos demostrar que, en realidad, no existió tal linealidad. En este sentido, si bien resulta cierto que Argentina visualizó al Mercosur como un espacio económico y como una forma de insertarse en un sistema internacional que consideraba beneficioso para quienes se abrieran a él, eso no significa que no hubiera impulsado la inclusión de otras agendas en el seno del organismo. De hecho, esta tesis tiene como objetivo explicar el lugar que ocupó la seguridad regional en la política exterior argentina entre 1989 y 2001, tratando de demostrar que los sucesivos gobiernos de ese período promovieron la creación de un mecanismo institucionalizado de defensa de carácter regional. Y que la mayoría de las propuestas pensadas con ese objetivo encontraron en el Mercosur el ámbito de referencia para concretar dicho mecanismo.De igual forma, las posturas que tuvieron las distintas administraciones a la hora de enhebrar una propuesta de este tipo tampoco fueron necesariamente homogéneas. Puede decirse que los esfuerzos no tuvieron siempre la misma intensidad: en algunos momentos se avanzó con más énfasis en la intención de articular un sistema subregional de defensa, mientras que, en otros, las propuestas no pasaron de las conversaciones, elucubraciones y esbozos entre las ?cuatro paredes? del Estado nacional.Ante este estado de cosas, la pregunta que recorre esta tesis se plantea de la siguiente forma: ¿cuáles fueron las motivaciones y objetivos que hicieron que la Argentina mantuviera en su política exterior una postura favorable a la creación de una instancia2regional de defensa durante la etapa neoliberal? De esta pregunta macro se desprenden, a su vez, una serie de interrogantes micro, que también obran como hilo conductor de esta investigación. A saber: ¿cómo se articularon en cada gobierno argentino la política exterior y la política de seguridad? ¿Cuáles fueron los principales factores ?externos e internos? que influyeron en la política de seguridad regional del país desde 1989 a 2001? ¿Cómo concibieron los gobiernos Menem y De la Rúa a la integración regional y qué lugar ocuparon los temas de defensa en el Mercosur? ¿Cuáles fueron las iniciativas de la Argentina respecto de la creación de una instancia institucionalizada de cooperación en estos organismos? Y, por último, ¿qué posiciones adoptaron los otros países de la región y cuáles fueron los límites y posibilidades de concretar un mecanismo de este tipo?Dicho esto y a efectos de intentar aportar una versión un tanto menos simplificada, podemos decir que el Mercosur tuvo para la Argentina un sentido fundamentalmente económico, pero dicho sentido no implicaba que las temáticas del organismo se tuvieran que reducir necesariamente a cuestiones económico-comerciales. En efecto, esta tesis parte de la premisa de que en las sucesivas iniciativas de la Argentina orientadas a materializar una instancia regional de defensa subyacía una intención de coadyuvar, desde la política de seguridad regional, a una política exterior en clave económica. Una política orientada a generar confianza externa y a través de los dividendos que otorgaba esa confianza, fortalecer un modelo económico profundamente dependiente de las inversiones y los flujos financieros.