El Manejo Integrado de Plagas (MIP) es un paradigma que promueve la integración de diferentes estrategias, de bajo impacto sobre el ambiente, para prevenir y controlar poblaciones de organismos plagas por debajo de un nivel que no genere un daño económico al cultivo. Entre las estrategias del MIP se encuentran el uso de insecticidas biorracionales y el control biológico. El uso de insecticidas es el método más empleado para el control de plagas en los agroecosistemas. Los insecticidas convencionales son los más utilizados por su efectividad de control; sin embargo, debido a su alta toxicidad muchos de estos compuestos han sido prohibidos o su uso ha sido restringido, en varios países del mundo. Los insecticidas biorracionales representan una alternativa al uso de los insecticidas de amplio espectro. Su mayor selectividad hacia los organismos plaga y bajo impacto sobre organismos benéficos y el medio ambiente, hacen que el uso de estos compuestos sea compatible con otras estrategias empleadas en programas de MIP. A su vez, la evaluación de la toxicidad de los insecticidas sobre organismos benéficos provee información útil para el desarrollo de los programas de MIP y su continuidad a largo plazo. El control biológico involucra la utilización de enemigos naturales (depredadores, parasitoides y patógenos), de forma temporal o permanente, para reducir la densidad de las plagas por debajo del nivel de daño económico. Los enemigos naturales pueden ser nativos o introducidos desde otra región. En los últimos 125 años, alrededor de 2700 especies de enemigos naturales han sido importadas, criadas y liberadas para el control de plagas a nivel mundial. Muchos de estos casos de introducción resultaron exitosos, desde el punto de vista del control biológico. Sin embargo, se han reportado efectos negativos causados por agentes de control biológico exóticos, sobre organismos no blanco, por competir por el espacio, presa u hospedador, participar en interacciones de depredación intragremio, etc. Harmonia axyridis Pallas (Coleoptera: Coccinellidae) es un depredador nativo de Asia, introducido en muchos países del mundo como agente de control biológico. El número de introducciones e individuos involucrados, su capacidad de dispersión, plasticidad para desarrollarse en un amplio rango de ambientes, hábito de alimentación generalista y su rol dominante en interacciones intragremio, han sido algunos de los factores que han contribuido al éxito de la invasión de esta especie. Además, H. axyridis puede convertirse en plaga de cultivos frutales, generando daños a frutos, y ocasionar molestias al hombre al invadir edificaciones, e incluso causar alergias. Este coccinélido ha sido categorizado como un agente exótico altamente riesgoso, según la Organización Internacional de Control Biológico (IOBC) y Unión Europea. Desde la introducción de esta especie en la Argentina en el año 1996, no se han realizado estudios de evaluación de riesgo ambiental que midan el impacto de esta especie sobre poblaciones de enemigos naturales nativos, presentes en los agroecosistemas. En este trabajo de tesis doctoral se estudiaron los parámetros biológicos y demográficos de H. axyridis. Se evaluó su susceptibilidad a los insecticidas biorracionales, azadiractina, piriproxifén y acetamiprid, y al insecticida convencional, cipermetrina. Además, se evaluó la interacción intragremio entre los coccinélidos H. axyridis y Eriopis connexa en presencia y ausencia de presa, y con presa contaminada con azadiractina, piriproxifén, acetamiprid y cipermetrina. El mantenimiento de las colonias de los coccinélidos y el áfido Rhopalosiphum padi L, así como los bioensayos, se llevaron a cabo en laboratorio en condiciones controladas de temperatura 25 ± 5 °C, humedad 75 ± 5 % HR y fotoperiodo de 16: 8 h L: O. A través del estudio de los parámetros biológicos y demográficos de H. axyridis se obtuvieron los siguientes resultados. El tiempo de desarrollo inmaduro de H. axyridis fue de 17,21 (± 0,11) días. El 55% de los individuos alcanzaron el estado adulto, la proporción de sexos fue 0,47, sesgada hacia los machos, y la longevidad de los adultos fue significativamente diferente entre hembras (61,87 ± 4,09) y machos (80,26 ± 3,68). Las curvas de supervivencia específica por estado y edad (Sxj) y de expectativa de vida (exj), mostraron los mayores valores de reducción de supervivencia al inicio del ciclo de vida (huevo y primer estadio larval). El periodo de preoviposición adulto fue de 7,09 (± 0,28) días. La curva de fecundidad específica (fxj) se caracterizó por presentar numerosos picos a los largo del período reproductivo. La fecundidad y fertilidad promedio de cada hembra, a lo largo de su vida, fue de 824,28 (± 94,91) huevos y 562,087 (± 70,60) larvas, respectivamente. Cuando se evaluaron los parámetros demográficos, se obtuvieron los siguientes resultados: r = 0,14 (± 0,005), Ro = 232,66 (± 39,011), λ = 1,19 (± 0,002) y T = 36,41 (± 0,662). En la evaluación de la susceptibilidad de H. axyridis hacia los diferentes insecticidas, los efectos de los mismos dependieron del estado de desarrollo ensayado, el insecticida y las concentraciones empleadas. Azadiractina causó una baja toxicidad sobre el estado de huevo y pupa, solo se registraron efectos letales y subletales en los tratamientos en los que se emplearon la MCRC (48 mg ia./L) y diluciones del 50% (24 mg ia./L). Sin embargo, los efectos sobre el segundo y cuarto estadio larval fueron más notorios Piriproxifén resultó ser altamente tóxico sobre el estado de huevo y pupa, reduciendo la emergencia de larvas y adultos a todas las concentraciones ensayadas. Este insecticida produjo una reducción de la supervivencia de larvas del segundo estadio aunque no ocasionó efectos subletales, además, resultó ser inocuo para larvas del cuarto estadio. Acetamiprid y cipermetrina resultaron ser altamente tóxicos para todos los estados de desarrollo de H. axyridis. Ambos insecticidas produjeron una gran reducción de la supervivencia de huevos, larvas y pupas. Cuando se evaluó la interacción intragremio entre H. axyridis y E. connexa en ausencia de presa los valores del nivel de depredación intragremio (IGP) indicaron un alto índice de interacción entre ambas especies. Por otro lado, los valores del índice de simetría de IGP demostraron que la dirección de la interacción favoreció a H. axyridis en la mayoría de los tratamientos. En los bioensayos con diferente densidad de presa, se observó el mismo patrón. Es este caso la densidad de presas representó un factor clave que intervino en dicha interacción. En los bioensayos con presa tratada con los diferentes insecticidas, azadiractina y piriproxifén causaron una reducción de la supervivencia de los individuos y, al mismo tiempo, influyeron en la interacción IGP, favoreciendo al depredador, H. axyridis. Por otro lado, debido a la alta toxicidad de los insecticidas acetamiprid y cipermetrina, no se pudieron evaluar los efectos de estos compuestos sobre dicha interacción. Este tipo de estudio permitió obtener valiosa información sobre la biología de la población local de H. axyridis, presente en el CHFP, su susceptibilidad a diferentes insecticidas y la interacción intragremio con E. connexa. Estos resultados permiten conjeturar el impacto potencial del depredador invasivo sobre este coccinélido nativo.