Las especies de Pleurotus, y en especial P. ostreatus, revisten importancia económica tanto a nivel global como para la Argentina ya que es la segunda especie de hongos comestibles más cultivada tanto en el mundo como en nuestro país. Varios factores hacen que los emprendedores que se inician en el cultivo de este grupo fracasen en el corto o mediano plazo. Por ello vimos la necesidad de lograr nuevas tecnologías más adecuadas a la realidad de los productores de la región, permitiéndole producir a bajo costo, determinar los sustratos más adecuados, encontrar métodos alternativos para el tratamiento del sustrato o estandarizar las variables y el manejo del cultivo. Por el ello, para esta tesis, nos planteamos los objetivos de: i) desarrollar nuevas técnicas para la producción de hongos comestibles que reduzcan la inversión necesaria inicial y que favorezcan la implementación de esta actividad en la Pampa deprimida del Salado (Provincia de Buenos Aires) y ii) lograr una estandarización de la producción de Pleurotus spp. para unificar y mejorar las prácticas cultivo. Para la producción de P. ostreatus se emplearon las técnicas tradicionales de cultivo, utilizando un sustrato lignocelulosico (en general paja de trigo, por ser el más usado en la región), al cual se le realiza un tratamiento para disminuir o eliminar microorganismos competidores. Se empleó como contenedor, bolsas plásticas. Para "sembrar" las mismas se utilizó un inoculante producido sobre grano de trigo estéril en el cual se siembra la cepa que se desea cultivar. La "semilla" se inoculó en una proporción del 5% respecto al sustrato. Luego, las bolsas sembradas fueron trasladadas a un cuarto de incubación en oscuridad y a 25°C; después de 3 semanas se logra la completa colonización del sustrato. Para inducir la formación de basidiomas, se les realizaron cortes u orificios a las bolsas en su superficie y fueron trasladadas a un cuarto de producción con las condiciones controladas: temperatura de 18°C, fotoperiodo, riego por aspersión y ventilación. Los hongos comenzaron a cosecharse después de 15 días y se tomaron los pesos obtenidos, el número de basidiomas, las medidas de los mismos, etc. La variable más importante empleada para medir rendimientos fue la eficiencia biológica (EB), que se calculó mediante la fórmula: Kg de hongos (peso fresco) / Kg de sustrato (peso seco) * 100. Con ella es posible comparar los rindes obtenidos en cada ensayo y tratamiento. En este trabajo se ensayaron nuevos sustratos que constituyen recursos abundantes para el país según la región. Respecto a los sustratos se observó que el despunte de la caña de azúcar es el sustrato puro más productivo encontrado a nivel mundial para Pleurotus ostreatus. La cortadera (Cortadera selloana), un sustrato de gran abundancia en la pampa húmeda pudo ser empleado para cultivar P. ostreatus con eficiencias biológicas superiores al 100%. El rastrojo de soja también pudo ser utilizado en la producción de este hongo obteniendo valores promedios de EB de 87,11%. El aserrín de álamo suplementado con salvado de trigo al 20 % logró una EB de 169 % por lo que puede ser empleado como un sustrato alternativo para aquellos productores que cuenten con este recurso; ya que, si se emplea sin suplementar, los rindes son muy bajos y económicamente inviables. Un hecho totalmente inédito fue el uso de pies como "sustrato" para la producción de hongos, en efecto hemos logrado emplear pies cortados para la producción de hongos con rendimientos considerablemente altos de EB: 175 % lo que se traduce en un recupero de la merma ocasionada por el descarte de los mismos. Cuando se estudiaron variables del cultivo y del manejo determinamos que el porcentaje de humedad en el sustrato fue un factor importante debiendo estar entre 65-75 %, siendo 70% el porcentaje más adecuado para cultivar esta especie. El carbonato de calcio que se usa para formular los sustratos no influyó en los rendimientos obtenidos por lo que puede descartarse cuando se usa paja de trigo. Respecto a los tratamientos previos a la siembra, muchos cultivadores emplean el método de pasteurización por inmersión en agua caliente. Hemos observado que este método disminuyó los rendimientos en la producción en un 20 % pero que resulta efectivo como método alternativo en el control de hongos competidores. Hemos buscado otros métodos de ?desinfección? observamos que el ozono retardó el crecimiento de hongos competidores como el Trichoderma, pero no resultó eficiente como tratamiento previo a la siembra. Algunos cultivadores emplean métodos "caseros" para tratar al sustrato; al replicarlos en el laboratorio hemos observado que el uso del extracto acuoso de Equisetum arvense (cola de caballo), no resultó útil para controlar los contaminantes más comunes presentes en los sustratos previos a la siembra. El uso de extractos acuosos con base en ajo, cebolla, tomillo y orégano no resultaron útiles para controlar los contaminantes más comunes presentes en los sustratos previos a la siembra. Por ello todos estos métodos deben descartase. Buscando un método químico alternativo estudiamos el uso del fungicida Carbendazim, observamos que pudo controlar e inhibir el crecimiento de contaminantes tales como Penicillium spp Trichoderma spp y, Asperigillus spp pero no controla a Rhizopus spp. También ensayamos un método de tratamiento del sustrato basado en la inmersión del mismo en agua alcalinizada con CaO al 2 %; hemos observado que luego de 12h fue posible controlar el desarrollo de Trichoderma spp en un sustrato previamente inoculado con conidios de ese hongo con el método de "spray" no afectando los rendimientos. Hemos estudiado cambios que permitieron aumentar los rindes. Los incrementos en la tasa de siembra del sustrato produjeron incrementos en la EB obtenida, el número de oleadas y el de basidiomas obtenidos y disminuyeron los tiempos de incubación. Un balance económico realizado nos indicó que al usar un porcentaje de semilla del 15% el productor puede duplicar sus ganancias. El estípite o pie del hongo, que es considerado un residuo, pudo emplearse como inóculo para hacer nuevas bolsas obteniéndose EB levemente menores al uso de inoculante sobre "semilla" al 5%, pudiendo almacenarse en heladera por 30 días sin afectar los rendimientos. Hemos estudiado como influyeron el número de perforaciones en la producción en bolsas, así como la distribución de las perforaciones. Observamos que el número de perforaciones (1, 9, 18 o 36) no afectó la EB en bolsas de 900g y 1800g, en cambio a partir de bolsas de 5000g, la realización de única perforación disminuyó considerablemente la EB%. Por ello aconsejamos al productor que si emplea bolsas de 900 a 5000g, utilice 9 perforaciones, ya que si realiza más no aumentan los rindes e implica un mayor costo en la mano de obra. Para el caso de bolsas de mayor tamaño, 12000g, al aumentar el número de perforaciones produjo mayores rindes por lo que se vislumbra una tendencia a lograr un mayor número de basidiomas de menor tamaño. Para bolsas de 1800 o 5000g es posible optar por un patrón de perforación 1L, es decir colocar las 9 perforaciones en una sola cara de la bolsa (pensando en que se divide imaginariamente la bolsa en 4 caras iguales) ya que no se obtuvieron diferencias significativas cuando se lo comparó con los rendimientos obtenidos usando el patrón tradicional de perforaciones en todas las caras de las bolsas. Esto le permite a los cultivadores aumentar notablemente la carga de sustrato en el cuarto de cultivo colocando más bolsas, una al lado de la otra sin necesidad de dejar espacio entre ellas como se hace en el método tradicional; de este modo, se aumenta los kg que cosechará el productor. El conjunto de prácticas y resultados aquí obtenidos da nuevas herramientas a los productores de gírgolas y en algunas casos permiten duplicar los rindes y las ganancias, por lo que creemos y esperamos que los resultados de esta tesis puedan ser rápidamente trasferidos y aplicados al sector productivo.