Un análisis de riesgo estima el peligro sanitario por exposición a sustancias químicas ambientales, para luego identificar, evaluar, seleccionar e implementar acciones de mitigación. En un principio, las metodologías consistían en estimaciones puntuales, unipersonales y monosustancia, determinísticas y conservativas, siendo imprecisas por no contemplar las incertidumbres y/o variabilidad de la información de base. Si bien posteriormente surgieron métodos superadores, los probabilísticos, seguían siendo espacialmente localizados, de tipo “sustancia por sustancia, medio por medio, riesgo por riesgo”; a raíz de ello, eran duramente criticados por generar una visión fragmentada del proceso de amenaza real ante la exposición a contaminantes. Lo que propone este trabajo es, siguiendo una metodología probabilística, desarrollar una herramienta que analice espacialmente el riesgo usando los SIG, disminuyendo, también, esa visión fragmentada al incluir otros elementos no contemplados en los modelos de análisis tradicionales. Con ella se definen niveles espaciales de riesgo por contaminantes en el agua de bebida (red domiciliaria y/o pozos de captación hogareñas) de la ciudad de Azul. Si bien la metodología en principio estima el riesgo conjunto por presencia de nitrato y fluoruro en el agua, se lo evalúa integralmente al asociarlo a información poblacional (cantidad de personas afectadas), socioeconómica (parámetros socioconómicos indicadores de exposición potencial), o también, relacionándola a procesos de transporte de contaminantes en agua subterránea para pronosticar el riesgo para diferentes horizontes temporales. Esto tiende a hacer del estudio del riesgo un proceso más sistematizable y objetivo. Esta herramienta expeditiva, totalmente novedosa para la gestión ambiental argentina, permitiría tomar medidas de corrección más adecuadas y eficientes.