El control biológico es una disciplina que utiliza enemigos naturales como parasitoides, depredadores y patógenos para regular poblaciones plagas. Aunque este ha sido eficaz en numerosas instancias, también existieron casos donde no funcionó. Una posible causa es la falta de criterios fiables para determinar a priori que atributos de los agentes de control determinarían una estrategia de control exitosa. Asimismo, no existe una teoría predictiva que permita pronosticar el tipo de estrategia más adecuada: la liberación simple o la múltiple. El modelo más utilizado para evaluar a los agentes de control fue la respuesta funcional. Sin embargo, es un modelo muy simplista y tiene bajo poder predictivo. El objetivo de este trabajo fue desarrollar enfoques metodológicos que, dado un grupo de especies candidatas, permitan estimar la estrategia más adecuada de liberación de enemigos naturales. Como sistema de estudio se utilizó a la cochinilla de los cactus Hypogeococcus sp., los parasitoides Anagyrus cachamai, A. lapachosus, y el depredador Hyperaspis conclusa. Primero se analizó la biología de las especies para identificar aquellos atributos biológicos que comparten con especies asociadas a programas de control biológico que resultaron exitosos. Luego se propusieron una serie de modelos, a partir de los cuales cada agente de control fue evaluado mediante un estudio dinámico de su respuesta funcional y su interacción con otros enemigos naturales. Los estudios efectuados acerca de la biología de los enemigos naturales indicaron que son fáciles de criar, que poseen una proporción de sexos balanceada y que su tiempo de desarrollo está sincronizado al del hospedador. Los parasitoides y el depredador tuvieron una cierta capacidad de aprendizaje en el consumo de las presas/hospedadores; sin embargo, en el depredador, ese aprendizaje obró de manera acumulativa, mientras que en los parasitoides no. En el depredador, el consumo de presas disminuyó al aumentar su edad. En los parasitoides, el consumo de hospedadores estuvo sujeto a la disponibilidad de huevos maduros de las avispas. En la interacción parasitoide-parasitoide, la especie A. cachamai fue la que tuvo mayor habilidad para explotar el recurso, y la especie A. lapachosus fue la que presentó mayor fuerza competitiva, además de comportarse como un hiperparasitoide facultativo. En la interacción depredador-parasitoide, H. conclusa tuvo la habilidad de distinguir entre presas parasitadas y no parasitadas, prefiriendo aquellas que sí lo estaban. En cuanto al control biológico de Hypogeococcus sp., los modelos planteados indican que una liberación múltiple producirá mayor control que una simple. Primero debería liberarse A. lapachosus, luego A. cachamai y finalmente H. conclusa.