Dos han sido los objetivos principales de este estudio, uno de carácter netamente estratigráfico y otro sedimentológico, vinculado con procesos diagenéticos en carbonatos continentales. En el primer caso y mediante el analisis detallado de depósitos sedimentarios desde el punto de vista facial, se pretende brindar un panorama másclaro de la estcatigrafía del Cretácico superior y del Terciario, fundamentalmente en la provincia de Entre Ríos, sin olvidar depósitos equivalentes de Corrientes y del Uruguay. En el esquema estratigráfico al que se arriba, se han tratado de respetar los nombres formacionales antiguamente propuestos y se pretende relacionar estas Formaciones con los megaambientes sedimentarios a través de los procesos asociados. Ha sido posible constatar que las rocas elásticas de la Formación Puerto Yeruá, compuestas fundamentalmente por depósitos psefíticos y psamítioos, con estratificación horizontal y entrecruzada fueron, sin duda, originadas por corrientes unidireccionales tractivas, de energía variable de alta a moderada, desde lechos planos y megaóndulas a fase de óndulas. Las corrientes fueron erosivas en una primera etapa, labrando los bancos pelicos inferiores e incorporando parte de este material. La pelitas que coronan algunas de las secuencias fueron depositadas por corrientes de baja energía y a partir de procesos de suspensión. Las estructuras mecánicas, la geometría de los cuerpos (de tipo predominantemente lenticular) y, la variabilidad granulométrica, indican que estos sedimentos fueron depositados por ríos de moderada a baja sinuosidad, con migración de barras de canal. El tamaño de grano de los depósitos que raramente alcanza el tamaño grava mediana, puede atribuirse a la falta de disponibilidad de elementos mayores; así se forman barras de material fino, las que suelen desarrollarse en ríos con gran descarga estacional y carga sedimentaria, pero con escasa pendiente. Estas epiclastitas sufrieron varios procesos de calcretización, desarrollándose perfiles típicos, en los cuales el carbonato comienza a aparecer como parches aislados, para luego formar cubiertas contínuas alrededor de los clastos de la roca hospedadora, determinando fábrica-K; son comunes los nódulos, el carbonato masivo, pisolítico o laminar y así las rocas pasan de areniscas y conglomerados a verdaderas calizas. Esto es característico del ambiente diagenético vadoso, donde se produce una rápida variación entre condiciones de cementación, fracturación no tectónica y sedimentación interna, especialmente en la parte cercana a la superficie. Estos microprocesos son los responsables de la distribución vertical mencionada. Las sedimentitas de la Formación Arroyo Avalos, apoyan discordantemente sobre las anteriores o sobre basaltos y areniscas de la Formación Curuzú Cuatiá. Materiales de diverso origen, desde rocas basálticas y areniscas hasta suelos, fueron afectados por procesos de calcretización, lo que originó perfiles compuestos, donde son comunes las estructuras y texturas diagonaticas, tales como laminación, nódulos, pellets, pisolitas, grumos, cristalarias, brechamiento "in situ", etcétera. Petrográficamente las rocas carbonáticas se clasifican como "wackestone" limo-arenosas y, en forma subordinada, "mudstone" limo-arenosas. Entre las clásticas predominan los depósitos de loess, constituídos por limolitas con areniscas y arcilitas subordinadas; sin estratificación o con estratificación grosera horizontal o subhorizontal. Son comunes los restos vegetales, los niveles edáficos y piroclasticos; en ocasiones pueden observarse delgados depósitos de conglomerados intraformacionales. No obstante, en la zona de Curuzú-Cuatiá predominan los fragmentos de rocas basálticas, que alcanzan tamaño de bloques. Aqui el carbonato se ha introducido en regolitos basálticos y aún en el basalto mismo, produciendo brechamiento "in situ". Sin embargo, estas sedimentitas presentan características estructurales y texturales semejantes, ya que son parte de un mismo proceso y afloran, aunque esporádicamente, en el cruce de la ruta 123 con el rio Corriente hasta el sur de Concepción del Uruguay en Entre Rios. La descripción detallada de las estructuras sedimentarias, la observación petrográfica minuciosa y la presencia de ciertas arcillas como palygorskita y sepiolita, propias de la diagénesis vadosa en la formación de calcretes, permitieron reinterpretar que las sedimentitas de la zona de Mercedes corresponden también a la Formación Arroyo Avalos y que no presentan rasgos que permitan asimilarlas a las rocas carbonáticas que afloran en el Parque Nacional "El Palmar" (Entre Rios), las que a su vez forman parte de la Formación Puerto Yeruá.